La Revuelta de Los Tres en Puerto Montt: Sin desperdicio y con toda el alma
Justo cuando el reloj marcaba las 20:10 horas del sábado 8 de junio, las, a esa hora, casi cinco mil personas que esperaban en el Arena Puerto Montt ovacionaron a Álvaro, Titae, Pancho y Ángel. La Revuelta de Los Tres estaba comenzando casi puntual en la capital regional. Los músicos se instalaron y comenzaron los primeros acordes de ‘Follaje en el invierno’. El tema instrumental propuso la entrada en calor de las y los asistentes. No era menor: la formación original de la banda penquista volvía a escena a casi 650 kilómetros de casa.
‘Sudapara’ fue el siguiente tema y los pies ya comenzaban a moverse en el cada vez más concurrido recinto ícono de los conciertos en la ciudad y la región. Ni bien el público terminaba de empezar a caer en la cuenta de lo que venía, ‘El Aval’ fue interpretada por Los Tres. Aplausos cerrados y gritos eufóricos. ‘Gato por Liebre’ seguía en el setlist, con Parra y Henríquez metiendo el riff de Day Tripper de Los Beatles en medio del solo.
Los cambios de instrumentos que cada uno de los integrantes hacían no dejaban espacio a la duda de que musicalmente la experiencia está a la altura del hito. La Revuelta continuó con ‘Hojas de té’, tema re grabado por el grupo en el marco de este retorno a las raíces. ‘La Torre de Babel’ fue la siguiente canción, mientras los juegos de luces y las pantallas traseras combinaban y hacían del concierto algo sensorial. Al costado, una pantalla por lado, dividida en dos, mantenía un plano fijo en vivo de cada uno.
‘Silencio’, ‘Feria verdadera’ y ‘Lo que quieras’ (una novedad respecto de las fechas anteriores) antecedieron a ‘Olor a gas’. ‘Claus’, ‘Largo y ‘No me falles’ cerraron la primera parte de la batería de éxitos clásicos de Los Tres en Puerto Montt. Entre medio, y porque pueden, Henríquez tomó las baquetas y se sentó en la batería, Molina se puso el bajo cruzado y Titae tomó el teclado. Fueron minutos de clases musicales.
Celebración
Lo especial que tuvo esta fecha marcada en un 8 de junio, esta vez de 2024, fue que se conmemoraban los 57 años del contrabajista de la agrupación. Roberto «Titae» Lindl recibió el cariño de sus compañeros quienes reversionaron Another Brick in the Wall de Pink Floyd cantando Las Mañanitas. Luego, a pedido de Álvaro Henríquez, los miles de presentes entonaron el Feliz Cumpleaños tradicional. Aplausos y ovaciones.
‘Tírate’, ‘De hacerse se va a hacer’ -que no figuró en los setlists de los conciertos anteriores-, ‘Toco fondo’ y ‘Morir de viejo’ fueron coreadas entusiastamente por las y los fanáticos. El ambiente era festivo, emotivo y se terminó de transformar en una fiesta imperecedera con tres hits de corrido: ‘Dejate caer’, ‘Un amor violento’ (de las más coreadas de la noche) y ‘Moizefala’. La paradoja era que esas veinte canciones ya superaban las expectativas iniciales, pero estas crecían a medida que los riffs, los solos, los beats y las líneas de bajo confluían a la perfección de la banda rockera por excelencia de los últimos 37 años en Chile.
No podía ser de otra forma. Llegaba la hora del primer giro temático, tras una hora y catorce minutos de espectáculo. La banda se retiró breves minutos, mientras se instalaba la caja cuequera de Molina, apareció una imagen de Roberto Parra proyectada en todas las pantallas. Se preveía lo que vendría. Cuatro covers de las cuecas del maestro: ‘El arrepentido’, ‘La perra con el perro’, ‘La vida que yo he pasado’ y, por supuesto, ‘Quién es la que viene allí’. En la cancha del Arena Puerto Montt fueron varias las parejas e incluso personas solitarias que mostraban sus mejores pasos de cueca chora.
Sigue la fiesta
Con la guitarra suave de ‘Amores incompletos’ prosiguió el show preparado por Los Tres, luego, para seguir bailando, ‘He barrido el sol’ fue el tema elegido. ‘La primera vez’, el tema que en los noventa desafiaba la institucionalidad del Servicio Militar obligatorio mantuvo la vibra bailantina del concierto. Y la que no podía faltar; ‘La espada y la pared’ cerró la primera parte magistral de La Revuelta.
Los cuatro de Los Tres se retiran y se proyectan imágenes de los 37 años que no han pasado en vano. Algunos creen que no volverán, pero la paciencia se cultivó durante los veinte años en que no estuvieron los mismos cuatro reunidos para tocar en vivo el repertorio de ya varias generaciones. Hasta que vuelven con ‘Pájaros de fuego’, ‘Bolsa de mareo’ y lo que muchos esperaban: cabecear con ‘No sabes que desperdicio tengo en el alma’. Ya eran más de dos horas en las que Los Tres se adueñaron del recinto ubicado en Egaña 1151. El clásico de Buddy Richard interpretado por muchos años por la banda, ‘Tu cariño se me va’, fue la pieza final de este inolvidable concierto.
La Revuelta de Los Tres vino a confirmar algo que no sabíamos, pero intuíamos. Sólo hay una formación de Los Tres que se puede jactar de ser el alma de lo creado: Álvaro, Ángel, Pancho y Titae. No hubo desperdicio.
Crédito Fotografías: Mariana Soledad (@mariana.soledad)