¿Quién es el candidato a concejal por San Juan de la Costa Luis Ferrada? El locutor que lleva 38 años escuchando a la gente

Luis Rolando Ferrada Webar (57) es un conocido locutor de radio La Voz de la Costa y quien, este año, se proclama como candidato a concejal por San Juan de la Costa. ‘Viva la gente’ por las mañanas y el ‘Cancionero mexicano’ más cerca del ocaso son los programas donde se puede escuchar. Ferrada compone la lista oficialista Chile Mucho Mejor con cupo del Partido Socialista.

El comunicador nació en Osorno, pero su infancia y adultez están marcadas por la comuna costeña. Los veranos eran típicos en Pucatrihue, Bahía Mansa y Maicolpué. «Lo recorríamos en tiempos en donde era muy difícil llegar para allá. No existían las conectividades que hoy día tenemos, no existía el asfalto, nada, todo era puro ripio. A pesar de esas dificultades, igual era hermoso poder llegar hacia el litoral. Pasábamos algunos días de vacaciones junto al sol de la costa», recuerda Ferrada.

El aspirante al Concejo Municipal realizó sus estudios básicos en la Escuela 1, actualmente Efraín Campana Silva. Los secundarios los hizo en el Liceo de Hombres, ahora Liceo Eleuterio Ramírez. A los 16 años, Ferrada perdió gran parte de su vista en un accidente en el sector de Choroy Traiguén. Eso lo obligó a estar un año en tratamiento hospitalario en Santiago, pero también lo ayudó a encontrar su gran pasión. Viajó hasta Concepción y estudió locución un año más antes de volver a Osorno a terminar sus estudios. Iba a la radio a locutear con uniforme del liceo, recuerda.

San Juan de la Costa

Además de sentirse identificado por sus hermosas playas, el nexo de Luis Ferrada, candidato a concejal, con San Juan de la Costa va más allá. Precisamente como locutor de una radio que históricamente ha alcanzado a llegar con sus ondas a la comuna, tiene también un vínculo cultural. «Hace más de veinte años empezamos a trabajar en encuentros culturales en las comunidades como Loma de la Piedra. El objetivo era realizar eventos vinculados a la cultura ancestral. Donde la gente también pudiera mostrar sus formas de vida, sus productos, su gastronomía, repostería, artesanía. Que la gente vaya a ver eso», explica.

El modelo resultó bien. «A partir de ahí se realizaron una serie de muestras y eventos culturales que hoy día afortunadamente el Estado las apoya. Antiguamente era iniciativa de la propia gente, de manera muy modesta, sin saber hasta dónde se podía llegar. Hoy día se replica de manera mucho más formal con aportes del mismo Gobierno Regional, por ejemplo. En gran parte de las comunidades indígenas de la costa fuimos replicando esta idea. Hoy esa es una de las principales actividades del verano allá y genera también mucho movimiento comercial y entretención», rememora.

Luis Ferrada pretende ocupar el cargo de concejal por la comuna también debido a sus vínculos personales, según cuenta. «He podido tener esa relación casi familiar con las personas de la costa y ser un receptor de muchas de sus inquietudes y de sus aspiraciones. Pero también de su de sus preocupaciones, de sus dolores. Tenemos una confianza enorme que he tratado de mantener. De repente me preguntaba ¿de qué manera podría tratar de avanzar, ayudar más a la gente?. Se me ocurrió que ya cumpliendo un ciclo importante, casi cuarenta años de radio, era suficiente. Era el momento para echar a andar este sueño personal y particular de servir desde otra vereda», argumenta.

Las tres prioridades como concejal

Para Luis Ferrada, hay tres prioridades claras a la hora de trabajar como concejal si es electo. «Hay un segmento importante de personas que han quedado pendientes y no les ha llegado la modernidad o la mano del Estado. Esta última, representada desde la acción del municipio. Tener un problema con un camino, que no llegue agua, electricidad, no tener ayuda social oportuna o una solución de vivienda es un problema enorme. Preocuparse de las personas es justamente poner el acento en los problemas y tener la capacidad de escuchar a la gente. Es importante respetar a la gente y a los territorios, y eso supone la cultura», enarbola.

Luego, hace propia como su segunda prioridad, el «fiscalizar bien la transparencia de los recursos públicos. Sobre todo en una zona en donde no hay tantos recursos como los que se quisiera o como hay en otros lados». A eso le suma, «la firmeza para plantear y defender los temas y las necesidades de la gente. Estar en el consejo no significa siempre ser obsecuente a lo que decida el alcalde.  A veces hay que enriquecer la propuesta, o simplemente no resulta conveniente. Hay que tener el carácter y la firmeza suficiente para decir en algún momento que se rechaza una propuesta o se aprueba».

Luis Ferrada también asume como prioridad valórica a la hora de trabajar como concejal, la honestidad. «Hay que decirle claramente lo que sí se puede hacer, pero también lo que no se puede hacer. No generar falsas expectativas. El concejal tiene facultades muy limitadas, las que son fiscalizar la acción del municipio y del alcalde, pero también es representar las necesidades de la comunidad. Uno tiene la capacidad de transmitir bien lo que la gente quiere y plantear con buenos argumentos para convencer a la autoridad que lo que se está planteando es importante», cierra.

 

Luis Ferrada en el Hospital Intercultural de la comuna