La Tatuajería: más allá de los tatuajes en Puerto Varas
En julio se cumplirán siete años desde que La Tatuajería se fundó como el primer estudio de tatuajes en Puerto Varas. Su socio fundador, Ángelo Tirini, conversó con «El Sureño» acerca de este trabajo que busca ser más que un lugar para pintarse la piel.
Hasta ahora, más de setenta tatuadores han pasado por La Tatuajería. La mayoría son artistas del tatuaje itinerantes que recorren el país realizando su trabajo. En Puerto Varas tiene esta alternativa, la que exige que realicen algún taller sobre la disciplina para la comunidad local.
«El concepto siempre fue que fuera una comunidad de tatuadores. Somos el primer local de tatuajes en Puerto Varas. La idea era mover esto del tatuaje, hace 25 años que conozco el rubro. La idea era que tatuadores de todo chile y el mundo pudieran pasar por acá y ser parte de este emprendimiento», cuenta Tirini.
Una casualidad
Ángelo llegó en 1995 a Santiago desde Buenos Aires junto a su madre chilena. Al año siguiente comenzó a aprender sobre el tatuaje. El cómo llegó a este arte lo califica de anecdótico y «gracioso». «Nos entraron a robar a la casa y no tenía radio para escuchar el ‘Chacotero Sentimental’. Así que lo iba a escuchar afuera de un local de tatuajes en la feria del Santa Lucía. Ahí conocí al Púas, que es uno de los tatuadores más antiguos de acá de Chile. Me empecé a meter en el mundo del tatuaje, me empecé a tatuar», narra el dueño de La Tatuajería.
Sin embargo, a los pocos años volvió a su natal Buenos Aires donde se dedicó al rubro de los restoranes y los bares. El tatuaje pasó a ser un pasatiempo. Pero como la pasión puede más, decidió irse a Europa para seguir aprendiendo y vivir del tatuaje. Luego volvió a Chile e instaló un local en la capital.
Las circunstancias de la vida y el amor lo trajeron hasta la región de Los Lagos, donde terminó asentado. «Venía siempre a ver a una pareja. Un verano vine para acá, iba a Punta Arenas y se me quebró un pie y me tuve que quedar. Me quedé en una hostal donde me quedé administrando, tatuando, conocí a más personas del tatuaje», cuenta Ángelo.
Junto a dos socios decidieron abrir La Tatuajería. «Siempre tuve la idea de abrir un local en un pueblo chico, que sea un tema nuevo. Que sea un tema con turismo, que puedan viajar tatuadores de distintos lados de visita, que fuera más que un local mío. Ahí partimos entre los tres abriendo la tienda de a poquito. Al año recién empezaron a venir varios invitados y después se hizo super conocida, una de las más conocidas en Chile en este momento», asegura.
Variedad y atención
Actualmente son cuatro las y los tatuadores y un perforador los que conforman el equipo de La Tatuajería. El personal ha ido rotando, explica Tirini. «Varias de las tiendas que se abrieron acá son chicos que trabajaron con nosotros. Siempre fue la idea de que se abrieran más locales y que no fuéramos los únicos. Hay como cuatro o cinco tiendas más. Que se potenciara el tatuaje en la zona como objetivo ya se logró», comenta,
Para Ángelo Tirini, su local es una especie de boutique del tatuaje en la zona. Incorporó cómics y juguetes a su inventario para que los propios hijas o hijos de los clientes lo pasen bien durante las sesiones. De hecho, uno de los planes es montar una exposición con los dibujos que las niñas y niños han dejado en el local mientras esperan.
«Ha sido más que nada un lugar de encuentro, el objetivo final mío es poner varias tiendas en Chile y que se abran escuelas para chicos en riesgo social. Vamos a partir con talleres en algunos colegios, pero la idea es abrir una escuela donde los chicos salgan con una orientación artística. Hacemos harto trabajo social, somos un centro de acopio de ropa y comida. Cuando empezó la pandemia juntamos leña y gas, trabajamos con juntas de vecinos. Somos una tienda más allá de los tatuajes en Puerto Varas», reflexiona.
La Tatuajería está ubicada en calle Estación 507 en Puerto Varas.