Familiares y organizaciones de Ancud acusan violencia institucional ante muerte de Bernardita Nicol Mendoza
A un mes del lamentable fallecimiento de Bernardita Nicol Mendoza Antiman (32), su familia, organizaciones y la comunidad de Ancud demandan a la Fiscalía de Ancud que se inicie una investigación exhaustiva para determinar con certeza la causa de su muerte y corroborar si hubo intervención de terceros.
Bernardita Nicol perdió la vida bajo custodia del Estado en el Centro Penitenciario Alto Bonito de Puerto Montt. Allí se encontraba en prisión preventiva por un delito del que se declaró inocente, señalando a su ex pareja como responsable.
El 8 de marzo, en conmemoración al Día Internacional de la Mujer Trabajadora, familiares, amigos, organizaciones sociales, profesionales de la Comunidad Terapéutica Vínculos y la concejala Ruth Caicheo se manifestaron en la plaza de Ancud exigiendo justicia para la familia de Bernardita Nicol.
Medida cautelar
«Fuimos testigos directos de la historia de esta joven que, desde pequeña, sufrió la violencia patriarcal como niña, joven y mujer adulta. Tuvo pocos meses de respiro y calma. Uno de esos períodos fue cuando logró avanzar y concluir, lentamente pero a paso seguro, su proceso de rehabilitación por consumo de sustancias, experiencia que acompañó el equipo terapéutico de la Comunidad Terapéutica Vínculos Chiloé durante casi tres años», señala el equipo profesional de Vínculos en una declaración pública.
A 22 días de recibir el alta, Bernardita Nicol fue detenida y trasladada al Centro Penitenciario Alto Bonito de Puerto Montt. Esto, debido a una cautelar dictaminada por el Tribunal de Castro por un delito relacionado con un parricidio frustrado. La víctima fue su hija de un mes de vida en octubre de 2020.
«Bernardita fue injustamente imputada. Antes del juicio oral, el sistema judicial la trató siempre como culpable. Además, fueron instituciones que desoyeron sin justificación alguna las constantes demandas tanto de la propia Bernardita como de la Defensoría Penal Pública. Buscaban acceder a la cautelar de arresto domiciliario total. Las razones eran las sistemáticas agresiones físicas y psicológicas de las que fue víctima dentro del penal», explican desde de Vínculos.
Impotente
Frente a los recursos interpuestos por la Defensoría para solicitar el cambio de la medida cautelar, los tribunales, incluida la Corte Suprema, denegaron su solicitud. Desatendieron así los argumentos que describían la situación de violencia a la que estaba expuesta Bernardita.
El 11 de noviembre de 2023, tres meses después de ser dada de alta psicológica por parte del servicio penal, Bernardita fue violentada sexualmente por un interno. Esto, con la aquiescencia de un gendarme del mismo establecimiento, según señala la Segunda Sala del Máximo Tribunal. Esta acción derivó en su traslado a Osorno para evitar su revictimización.
«Estaba desesperada, angustiada, desesperanzada, impotente, indefensa. Aun así, intentó cada vez que pudo exclamar su inocencia, comunicar la incertidumbre en que vivía, actuar con los medios a su alcance para protestar por su estado físico y emocional y por la injusticia de la cual era víctima. Intentó, así, un acto desesperado de inmolarse para hacer notar su voz y hacerse escuchar», comentan desde la Comunidad Terapéutica Vínculos sobre el caso de Bernardita Nicol.
Bernardita Nicol falleció dentro de la Asistencia en Salud Ambulatorio el 30 de enero de 2024, según consta en el reporte oficial. Su madre, Silvia Antiman, fue notificada de su muerte a la 01:00 de la madrugada, pero cuando los gendarmes ingresaron a su celda a las 17:00 horas la encontraron sin vida, desconociendo la causa exacta del deceso. La falta de acceso al informe de la autopsia genera incertidumbre, y la familia solo dispone de un certificado que menciona que la muerte ocurrió alrededor de las 22:00 horas por asfixia.
