Un EP de cinco canciones y algunos sencillos colgados en las plataformas digitales bastaron para que Paula Anguita dejara de escucharse solamente en tocatas raperas. 22RUZZ es su nombre artístico, derivado de su tag ‘Ruska’ con el que hace hablar paredes en cada lugar visitado. Graffitera, cantante, tatuadora, escritora visceral de Peñalolén. Artista al fin y al cabo. Del underground al escenario, en menos de un año.

El 22 de junio de 2022 lanzó su primer EP llamado, cómo no, ’22’. Desde allí no ha parado. Teloneando y colaborando con artistas de la escena local y extranjera, su talento destacó de inmediato. «Yo antes siempre rapeé y se me conocía porque rapeaba y graffiteaba. Hice este proyecto y saqué estos temas, los empezamos a tocar en varios lugares el año pasado. Estamos en un viaje, todo ha sido muy bonito y orgánico», cuenta tras tocar por cerca de media hora en el volumen 11 de Calleja Rap.

La primera sensación que le deja el show en Osorno es de gratitud. Lo cuenta mientras destaca el cariño y agradecimiento que le demuestran quienes la van a ver y también los que la conocen en alguna de sus presentaciones. Justamente, mientras conversamos en las afueras del local donde se presentó, tres veces somos interrumpidos por asistentes que le dan las gracias. Por sus canciones, por la atmósfera, por el gran nivel de rap.

Ensayo y error

Para alcanzar ese nivel, junto al Dj Redmist y el beatmaker y productor Eggglub, ensayan de tres a cuatro horas, una vez a la semana. Hubo un tiempo en que lo hicieron dos veces por semana, además de una presentación el mismo fin de semana. Ese fue el período en que alcanzaron la mejor forma del show, el que se sigue puliendo ensayo tras ensayo y tocata tras tocata.

«Estoy consciente del nivel que tenemos porque nos sacamos la cresta para eso, es bacán que te lo reconozcan. La da sentido a todo el esfuerzo y todas las proyecciones que tuve porque sí, porque quise, no porque se lo ibas a mostrar a la gente, sino porque me gusta hacerlo bien.  Me impacta y a la vez me enorgullece. Lo tomo con calma y tampoco intento que eso me alucine «, asegura 22RUZZ.

Su compañero Daniel Cancino, o Eggglub, agrega: «eso ayudó a consolidar más ciertas intenciones que podíamos tener con la música que estábamos haciendo. Esa locura mental de tanto trabajo determinó algunas cosas para entendernos y afiatarse. A  cómo estábamos tocando la música. Ensayo tras ensayo pasaban tantas cosas, algún error, y después cuando tocabas, lo mismo. Al final uno decía ‘por acá va la cosa, apretamos esto pero podemos soltar un poco este otro aspecto’. Al mismo tiempo, la Paula tiene una forma de disfrutar, de tocar y hacer la música que a mí me motiva para seguir haciendo más cosas».

La rapera santiaguina explica que la complicidad con ambos compañeros es fundamental. «Nos miramos a los ojos, tenemos comunicación visual, complicidad, porque somos familia ya. Por eso cuando una persona dice gracias, o tus Dj’s son brígidos, yo con orgullo digo gracias», plantea.

Underground

Hablar de underground es difícil. No hay alguien que explique los marcos es los que se mueve esa escena. Para Paula se trata de una visión personal y que puede tener diversas interpretaciones. «Yo sí soy under. Igual es cuático, es como decir ‘sí, yo soy humilde’, pero si lo dices es un poco contradictorio», explica.

Eso sí, tiene claro cuándo fue la vez que se sintió fuera del under. «Fue cuando subí mi primer video de rap y mostré mi cara. Yo era under por el graffiti, porque mi rap estaba solamente en las tocatas», narra. Lloró y tuvo una crisis de pánico. Aún toca en esos espacios, dice. Aunque hacerlo también en grandes escenarios le ha traído un costo. «A veces no me quieren llamar de eventos under, porque piensan que les voy a cobrar, y eso me parece raro», revela.

«Al final quién sabe qué es realmente el underground. Tú vives el under a tu manera. Hay gente que podría ser un producto y no lo es, porque sus letras siguen siendo originales, pero que también están super involucrados en la industria. Yo me siento del under porque no me siento una estrella. Por eso me impacta la gente que me agradece, pero también me estoy exponiendo más. Soy parte de la escena y me gusta serlo. Quizás alguien pueda decir ya no eres under y lo entiendo», reflexiona la artista.

Proyecciones

22RUZZ, la rapera, no lo es a tiempo completo. O al menos no quiere serlo. Por ahora, cuenta, no vive de la música. Se da el lujo de no seguir garzoneando como lo hizo en los últimos años antes de la explosión musical. «No sé si quiero vivir de la música. Me gustaría hacer algo que me guste. No quiero garzonear más, yo tatúo, ya viví de eso, pero también se desgastó. Quiero trabajar en algo que tenga que ver con el arte, como una pega estructurada, hacerlo bien. Quiero aprender asistencia de cámara,  ser productora, o diseñadora gráfica, quiero estudiar», afirma.

«Me encanta hacer esto, no necesariamente por la plata. Que llegue plata es bacán y lo agradezco muchísimo. Si se da, pulento, pero no es mi meta, no es mi proyección en mi música, lo que quiero es cultivarme y seguir haciendo buena música», adelanta 22RUZZ.

Aunque por ahora, se concentra en que salgan más y más fechas para tocar. Ojalá en Latinoamérica completa, donde sea, asegura. «Se viene tocata en Peñalolén, donde todo empezó, me encanta ir para allá, es a beneficio de gente privada de libertad. Estoy esperando que salgan fechas, he prendido velitas para que salgan algunas», asevera.

Y sobre música nueva proyecta: «quiero sacar música en abril, mayo y junio. Espero poder cumplir con las fechas. El 22 de junio quiero sacar un EP igual que el año pasado, así como una tradición». Es probable que sea un disco bien rapero. Volvió a escuchar mucho rap tras un receso voluntario por algunos meses. En esa época se introdujo en el r&b. Le encanta y quiere mejorar su canto autodidacta. Pero también su música tiene rasgos de boleros, música brasileña, salsa, trap, trova, jazz. «Lo mismo de siempre», dice.

Aunque aclara: «Yo soy rapera, entonces hago un rap arriba de una pista de trap. Me gustan caleta esas pistas, pero yo hablo de otras cosas, no de lo que habla el trap».  Y sentencia: «lo mío es rap fusión». Y se nota.

Inolvidable

La jornada fue extensa. Más de diez artistas de distintas ciudades y trayectorias redondearon una noche perfecta. Una vez más Calleja Rap cumplió con las expectativas. 22RUZZ agradece el profesionalismo de la organización del evento.

«Es de los eventos más profesionales que hemos venido, con respecto al trato con nosotros. Creo que a veces no le dan importancia a eso, a que te traten tan bien. Primera vez que viajo en avión a tocar, eso para mi fue un logro que nunca me lo propuse, pero pasó.

«Me encanta el sur, nunca había venido a Osorno, siempre quise conocer. Llegamos a un hotel, con comida, increíble. Bacán haber venido a Osorno y me hace sentido haber querido siempre conocerlo, porque marca un antes y un después de lo que es mi proyecto. Por siempre me voy a acordar de Osorno«, cierra.

Ruzz enrola un tabaco, vuelve a entrar al local del evento. Son cerca de las cuatro de la mañana y queda todavía un artista en el escenario. El viaje sigue.